miércoles, septiembre 05, 2007

Multiplicidad de tratamientos

Ayer escuchaba una noticia curiosa cuyo contenido no recordamos con exactitud. Venía a decirse que una dieta rica en plátanos, masajes y alguna que otra "terapia" producía efectos beneficiosos en la salud de un elefante. Noticia anodina, curiosa y hasta divertida de esas que se publican en radio y televisión de vez en cuando y que nos provocan admiración o sonrisas. Así fue en este caso, pero además nos llevo hacia pensamientos más prácticos. Tras la escucha, mediatizado sin duda por nuestra perspectiva científica, nos interrogamos sobre la causa de los beneficios en el elefante. ¿Fue la dietoterapia o la masoterapia?¿O fue acaso el otro remedio que no recordamos? ¿O fue una combinación de los tres o de dos de ellos? Reflexión tan banal guarda relación con cuestiones que atañen a la práctica cotidiana del fisioterapeuta. Llevados por motivaciones tales como prescripciones, por prolongar el tiempo del tratamiento, por descargarnos de trabajo manual, por utilizar técnicas novedosas, etc. utilizamos dos, tres, cuatro y aún más técnicas, parecidas o distantes, para muchos de nuestros tratamientos. Esta manera de proceder, con la que muchos hemos crecido profesionalmente, nos ciega sobre los efectos que se consiguen, ocultando, magnificando o minimizando los mismos. ¿Cómo vamos a saber y afirmar que el ultrasonido a tal o cual potencia y tiempo consigue disminuir el dolor si concurrentemente hemos hecho una movilización con impulso? La creencia común puede hacernos creer que hay sinergia entre las técnicas si recordamos los supuestros efectos fisiológicos de las mismas. Pero, ¿es así realmente? Lo que debemos buscar es la manera más rápida y eficaz de mejorar al paciente y con la aplicación múltiple de técnicas se consiguen dos cosas: utilización de tiempo tal vez innecesario e imposibilidad de reconocer la eficacia de una técnica particular. Pero, ¿puedo conocer esa utilidad o inutilidad antes de aplicar la técnica? Sí, en muchas ocasiones gracias a los artículos de investigación cuyo uso recomendamos ferviertemente para nuestra práctica.

lunes, julio 23, 2007

Obstáculos del paradigma científico en la práctica de la fisioterapia

Obstáculos del paradigma científico en la práctica de la fisioterapia


Un cuestión por resolver
La fisioterapia, como disciplina científica que pretende ser, está sometida para la consecución de sus avances al método científico. El método, cuyas características podremos abordar en otra ocasión, es flexible, pero tiene unos pasos ineludibles para ser considerado científico. Si la fisioterapia aspira a consolidar y aumentar su grado de cientificidad debe ser rigurosa en la plicación de sus directrices. Sin embargo, nuestra profesión tiene una serie de peculiaridades inherentes a sus atributos (terapeuta dependiente, prácticas manuales, etc.) que suponen un serio escollo para la aplicación del método científico. Exponemos algunas de las dificultades con las que nos encontraremos al pretender llevar a cabo un estudio experimental:


* Difícil reproducibilidad (el gesto terapéutico casi nunca es el mismo).

*Multiplicidad de protocolos (duración del tratamiento, número de sesiones, etc.).

*Difícil mensurabilidad (¿cuánto masaje?).

*Multiplicidad de técnicas. (¿cuál es la técnica que hace el efecto?)

*La “fuerza de la costumbre” (la reproducción autómata de gestos por endoculturación profesional).

A estas "dificultades" se ha de añadir una que se superpone a todas: la escasa, escasísima cultura investigadora no sólo de estudios primarios (estudios sobre pacientes) sino sobre la crecientes y muy disponibles fuentes de información secundaria (Pubmed, Biblioteca Cochrane, PEdro Database, Trip, etc.).